¿Qué está pasando en Transnistria? Acusaciones de guerra híbrida por parte de Moscú, frente a las acusaciones de actos de falsa bandera por parte de Kiev y la OTAN

El pasado 20 de abril, el jefe en funciones de la Circunscripción Militar Centro, el general mayor Rustam Minnekéyev, admitió abiertamente que «una de las tareas del Ejército ruso es establecer el pleno control sobre el Dombás y el sur de Ucrania». Confirmaba así la posibilidad de que Moscú extienda la ofensiva al oeste, hacia Transnistria, pasando por Mykolaiv y Odesa.

Entre el 25 y 26 de abril se produjeron una serie de tres ataques en diferentes instituciones militares de Transnistria. Las explosiones afectaron en primer lugar, el día 25, a la sede del ministerio de Interior de Transnistria. Supuestamente el ataque fue ejecutado con lanzacohetes. Esa misma jornada se producía un ataque contra una infraestructura de radio de las fuerzas prorrusas en la región. En el día de ayer se producía el tercer incidente, una unidad del ejército de Transnistria fue atacada con explosivos.

¿Qué es Transnistria y el supuesto interés de conectarlo con Rusia?

Transnistria es un estado con reconocimiento limitado que internacionalmente es reconocido como parte de Moldavia. Se ubica principalmente entre el río Dniéster y la frontera oriental de Moldavia con Ucrania. Declaró su independencia en 1990, en los años convulsos antes de disolución de la Unión Soviética, las tensiones entre el gobierno moldavo y las autoridades del Estado separatista de Transnistria, culminaron en la guerra de Transnistria, iniciada ese año y finalizada con un alto el fuego en julio de 1992. Con apenas medio millón de habitantes, se mantuvo cercana a Moscú cuando Ucrania y Moldavia comenzaban a dejar atrás la Unión Soviética a principios de los años 90 y alberga más de 20.000 toneladas de armamento soviético desde el fin de la Guerra Fría. La República de Moldavia no reconoce la secesión y considera los territorios controlados por la RMP como parte de la región autónoma moldava de Stînga Nistrului.

Aunque se haya mantenido el alto el fuego, el Estatus político de Transnistria continúa sin resolverse, ya que aunque Transnistria no es reconocida internacionalmente, es de facto un Estado independiente. La situación de Transnistria suele calificarse como conflicto postsoviético congelado, en la misma situación que por ejemplo Artsaj, Abjasia y Osetia del Sur, o lo que parece que pasará con Lugansk y Donetsk o con la creación de la que prepara Moscú de la autodenominada República Popular de Jersón (RPJ). Controlando este territorio, Rusia conectaría la base militar de esta zona, que tiene un arsenal que llegó después de la desintegración del bloque socialista. Además, esta franja le sirve como línea de frontera externa, ante un ataque, lo que le posibilitara defender con bombardeos sin dañar el territorio más cercano a Rusia.

Imagen posterior al ataque al Ministerio de Interior de Transnistria.

Ataques en Transnistria e implicaciones

Acusaciones de guerra híbrida

Tras los ataques, el Presidente de Transnistria, Vadim Krasnoselski, dijo que se sospechaba que Ucrania estaba detrás del ataque, además, señaló que habían sido detectados drones ucranianos cerca de la frontera entre Moldavia y la región. También, Krasnoselski, acusó a Kiev de poner en marcha acciones de guerra híbrida en la región, señalando la similitud con las explosiones y sabotajes en territorio ruso. Las denominadas amenazas híbridas son acciones coordinadas y sincronizadas que atacan deliberadamente vulnerabilidades sistémicas de los Estados y sus instituciones a través de una amplia gama de medios y en distintos sectores objetivos (políticos, económicos, militares, sociales, informativos, infraestructuras o legales). Una las claves de estas acciones es la dificultad final de detectar el origen de las mismas.

Rusia, que apoyó a los separatistas durante el conflicto armado por el que la autoproclamada república rompió lazos con Moldavia. A las declaraciones de Krasnoselski, tenemos que sumar las del viceministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Andréi Rudenko, que insinuó una invasión de Moldavia, diciendo que le «gustaría evitar tal escenario» en el que Moscú tuviera que intervenir, pero que «ciertas fuerzas» habían creado «un semillero de tensión». Además, el líder de la autoproclamada República Popular de Donetsk, Denis Pushilin, dijo que Moscú debería «tener en cuenta lo que está sucediendo en Transnistria» al planificar la próxima etapa de su campaña militar.

Imagen de la antena atacada al sur de Transnistria.

Acusaciones de ataques de falsa bandera

El Ministerio de Relaciones Exteriores de Ucrania dijo que las explosiones eran parte de un plan de Rusia para ocupar el sur de Ucrania con el fin de establecer un puente terrestre entre Transnistria y Crimea. Según Kiev, Rusia estaría llevando a cabo ataques de falsa bandera con el objetivo de trasladar el conflicto a esta región y aprovechar para aumentar su territorio frente a Moldavia y Ucrania, desde este punto. Una operación de bandera falsa es una operación encubierta llevada a cabo por gobiernos, corporaciones y otras organizaciones, diseñada para aparecer como si fueran llevadas a cabo por otras entidades. El nombre se deriva del concepto militar de izar colores falsos; esto quiere decir, la bandera de un país diferente al propio para involucrarlo en un conflicto.

Entretanto, el Consejo de Seguridad de Moldavia, reunido de urgencia, ha recomendado elevar la vigilancia y reforzar la seguridad, según ha informado la presidenta, Maia Sandu, que ha advertido de que las «tensiones entre diferentes fuerzas» en Transnistria amenazan también la seguridad al otro lado del río Dniéster y que «estas acciones suponen un riesgo para la paz en el país». Además, ha señalado los intereses de Rusia en la región.

Por último, la OTAN ha avisado este miércoles de posibles ataques rusos de falsa bandera tras las explosiones en la región separatista de Transnistria, en Moldavia, a la luz de la guerra en Ucrania y de las implicaciones en la seguridad del país. El portavoz de la OTAN asegura que la alianza militar está «preocupada» por las explosiones en Moldavia los pasados días y «de su relación con posibles grupos que estarían llevando a cabo acciones de falsa bandera con el objetivo de justificar una posible invasión», ha declarado Jens Stoltenberg, secretario general de la Organización del Tratado del Atlántico Norte.

2 comentarios en «¿Qué está pasando en Transnistria? Acusaciones de guerra híbrida por parte de Moscú, frente a las acusaciones de actos de falsa bandera por parte de Kiev y la OTAN»

  1. Interesante explicación. La verdad que Ucrania con el apoyo de EEUU y aliados intentará llevar a cabo sabotajes, guste o no Rusia atacó y Kiev responderá con todo, pero se una manera táctica…

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  2. Transnistria es un polvorín en todos los sentidos. Es una oportunidad para juntarlo con Rusia, y una carta de Ucrania para acusarles de querer ir a por más países de Europa y colaborar más con Ucrania. Va a pasar lo mismo en Bielorrusia o Kazajistán.

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