El 11 de octubre de 2022, los líderes del G7 han amenazado con más medidas de presión sobre Rusia tras los ataques perpetrados sobre distintas ciudades ucranianas, en respueta al ataque del SBU al puente de Crimea. El foro que agrupa a las principales potencias, que han invitado también a la UE, se ha reunido de urgencia para examinar la oleada de ataques perpetrados desde el lunes por las fuerzas rusas. Según el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, que ha hablado en este encuentro, su país ha sido atacado con más de cien misiles.
Las autoridades de Polonia investigan una fuga de petróleo en el oleoducto de Druzhba, clave para el suministro de crudo al centro de Europa, detectado el martes por la noche. La empresa encargada de la gestión está investigando las causas de la avería y por el momento descarta que se trate de un sabotaje.
Paralelamente, el hombre más rico del mundo y jefe de Tesla, Elon Musk, habría mantenido una conversación privada con el presidente ruso, Vladímir Putin, en la que este le habría dicho que usaría armas nucleares para defender las regiones anexadas de Ucrania.
El G7 amenaza con más medidas contra Rusia por los bombardeos
El G7 mantiene un compromiso «decidido y firme» con la soberanía y la integridad territorial de Ucrania, lo que pasa por seguir ofreciendo ayuda «financiera, humanitaria, militar, diplomática y legal». «Estamos comprometidos a apoyar a Ucrania para afrontar las necesidades del invierno», han acordado los líderes.
Compromiso de ayuda militar urgente
En el ámbito de la Defensa, están dispuestos a «coordinar esfuerzos» para solventar las necesidades «urgentes» de Ucrania, si bien la ayuda depende de los compromisos que vayan adquiriendo a título individual cada país. Zelenski ha reclamado más equipos de defensa antiaérea. También se han mostrado «profundamente preocupados» por los «daños deliberados» en los gasoductos Nord Stream a su paso por el mar Báltico y han respaldado las investigaciones en curso, aunque han evitado culpar a Moscú de este sabotaje.
Nueva edición del Grupo de Contacto de Defensa de Ucrania
El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski y los secretarios de Estado y de Defensa de Estados Unidos, Antony Blinken y Lloyd Austin, respectivamente, se reunieron en Kiev el 24 de abril de 2022. Su visita buscaba mostrar apoyo a Kiev y preparar la reapertura de la delegación diplomática de EEUU en el país. Pero la clave de la visita no estaba ahí, se presume que ambas partes estaban preparando la reunión del día 26 de abril, con más de 40 países en la Base Aérea de Ramstein, en Alemania.
Desde aquella este foro ha organizado el envío de armas a Ucrania, y se espera ampliar.
Mensaje a Putin del G7
Los líderes del G7 sí han atribuido a Moscú una escalada en la que incluyen la movilización parcial de reservistas y la «irresponsable retórica nuclear», que pone en peligro la seguridad global. «Reafirmamos que cualquier uso de armas químicas, biológicas o nucleares por parte de Rusia acarreará graves consecuencias», han declarado.
El G7 ha incluido entre los agravios los intentos de Rusia para anexionar cuatro regiones del este de Ucrania, algo que se han comprometido a no reconocer «nunca». En este sentido, han reclamado a otros países que rechacen «inequívocamente» estos intentos de apropiación de territorios ajenos, advirtiendo de que cualquier intento de modificar las fronteras de Ucrania acarreará «nuevos costes económicos» en forma de sanciones.
Mensaje a Bielorrusia y su posible entrada en la guerra
El comunicado final del G7 ha incluido también una alusión al papel de Bielorrusia. Zelenski sí advirtió en su discurso del papel que desempeña Minsk en toda esta ecuación. «Reiteramos nuestro llamamiento a las autoridades bielorrusas para que dejen de facilitar la agresión al permitir a las Fuerzas Armadas rusas que usen territorio de Bielorrusia y proporcionar apoyo al Ejército ruso», han concluido las potencias. En su opinión, el anuncio de un grupo militar conjunto entre los dos países «es el ejemplo más reciente de la complicidad del régimen bielorruso con Rusia», por lo que han instado a Lukashenko a «cumplir sus obligaciones en el marco del Derecho Internacional».
¿Nuevo sabotaje energético? Polonia detecta una fuga en el oleoducto de Druzhba
Las autoridades de Polonia investigan una fuga de petróleo en el oleoducto de Druzhba, clave para el suministro de crudo al centro de Europa, detectado el martes por la noche. La empresa encargada de la gestión está investigando las causas de la avería y por el momento descarta que se trate de un sabotaje. El punto donde se ha producido la incidencia se encuentra a unos 70 kilómetros de la ciudad de Plock y a 150 de Varsovia. y afecta a una de las dos líneas del oleoducto, según un comunicado del operador polaco, PERN. Sus técnicos han confirmado que solo una de las tuberías de la línea resultó afectada y la otra «funciona con normalidad».
Oleoducto Druzhba
El oleoducto Druzhba, cuyo nombre significa «amistad» en ruso, es uno de los más largos del mundo y fue construido por la Unión Soviética para unir los yacimientos de petróleo de Siberia occidental con Europa. El brazo norte atraviesa Polonia y llega hasta Alemania, donde abastece a la refinería alemana de Schwedt. El tramo afectado es el de más capacidad de los dos que tiene el oleoducto y puede transportar hasta 77 millones de toneladas de petróleo al año. Las tareas de limpieza continúan y, según los bomberos, cuando se consiga extraer la mayor parte del petróleo vertido se podrán identificar las causas de la avería.
Hace pocos días, Varsovia elevó su nivel de alerta al segundo más alto para «asegurar las infraestructuras energéticas» nacionales y la mantendrá vigente hasta el 30 de noviembre. Esta decisión se tomó después de los sabotajes producidos en el gasoducto Nord Stream, cuya autoría sigue sin esclarecerse pero que el Gobierno polaco atribuye a una posible «provocación» rusa.
El mensaje que Putin a Elon Musk: «tomaré Ucrania»
Elon Musk lleva presente en la guerra de Ucrania desde el principio, cuando facilitó el sistema Starlink a las Fuerzas Armadas de Ucrania tras el barrido inicial de la Fuerza Armada Rusa sobre las telecomunicaciones. La semana pasada volvía a entrar en el foco informativo de la guerra al apoyar indirectamente el referemdum prorruso en el Dombás, a través de Twitter, y esta habría sifo la clave para acceder a la conversación con Putin.
Musk le habría dicho al analista geopolítico y jefe de la consultora Eurasia Group, Ian Bremmer, que Putin estaba decidido a ganar su guerra en Ucrania «sin importar nada» en unas conversaciones privadas mantenidas hace pocas semanas en un intento de mediación pacífica del magnate. En dicha conversación, Putin le habría dicho a Musk que estaba «preparado para negociar» un acuerdo para la paz con Ucrania con la condición de que Crimea fuera reconocida como parte de Rusia.
Pese a que por el momento se descarte un sabotaje, la fuga del oleoducto Druzhba ocurre sólo unas semanas después de los sabotajes del Nord Stream y sería extraño que se tratase de una coincidencia o que las averías no tuviesen una causa común.
Por otro lado, es normal que tras el reciente «acercamiento» de Elon Musk a Rusia, surjan dudas sobre cuál es su postura actual con respecto a la guerra.