EE. UU. y Marruecos contra Rusia y Argelia. Geopolítica, guerra híbrida y gas

La situación geopolítica internacional tras la pandemia, presenta un nuevo juego de intereses que nos hace recordar a la guerra fría. Muchos expertos ya denominan las disputas actuales entre EE. UU. y sus aliados frente a Rusia y los suyos, como la «Nueva Guerra Fría». Realmente los intereses de estas dos potencias mundiales no dejaron de enfrentarse desde la Guerra Fría. Lo que ha cambiado, es que ahora el enfrentamiento se viraliza en las redes y eso permite al público general enterarse de lo que antes se mantenía oculto.

España, si no quiere seguir descuidando su geopolítica, debería moverse con pies de plomo en sus relaciones con Argelia y Marruecos. El enfrentamiento entre estos dos países ha escalado en los últimos años y sus respectivas alianzas con EE. UU. y Rusia, indica la complejidad del conflicto. España está en medio del conflicto. Argelia es el principal proveedor de gas de España, pero su alianza con Rusia hace que EE. UU. no mire con buenos ojos a España.

Penos de pintados con las banderas de Rusia y EE. UU. sobre un tablero de ajedrez.

La geopolítica marca el interés de EE. UU. y Rusia en Marruecos y Argelia

Argelia y Marruecos tienen características comunes que les hace atractivos a la hora de tenerlos como aliados en la región. Aún siendo regímenes no democráticos, están dirigidos por gobiernos islamistas moderados, lo que facilita sus relaciones con occidente. Esto tiene una importancia clave en el norte de África, ya que el extremismo Islamista es uno de los principales problemas en este territorio. Además, a Rusia le interesa que Argelia no se acerque a Arabia Saudí, aliado de EE. UU. A los estadounidenses le interesa la alianza con Marruecos para que no se acerque a Irán, aliado de Rusia.

Otra característica importante es que estos dos países ocupan territorios estratégicos al sur de Europa. A EE. UU. le interesa Marruecos como aliado junto a la UE, ya que no puede permitirse que Rusia controle una parte del acceso al Mediterráneo. La importancia de controlar el acceso al Mediterráneo es tal, que si se bloqueara el paso por el Estrecho de Gibraltar, parte del comercio mundial se vería afectado. Las rutas desde China, India u Oriente Medio que pasan por el canal de Suez, con final en Reino Unido o Países Bajos, se verían afectadas. EE. UU. es consciente de esto y no deja de ampliar su relación con el Reino de Marruecos, como contrapeso al poder que le a Rusia su alianza con Argelia.

Además, si Marruecos se aliara con Rusia, podría realizar estrategias envolventes sobre el continente Europeo. Por motivos comerciales o por motivos estratégicos EE. UU. tiene claro que debe tener presencia en la zona. Esto se puede ver en la base militar que EE. UU. comparte con España en Rota. Esta base colabora habitualmente con la OTAN y tiene un despliegue militar fijo de gran importancia. No cabe duda que es una zona de máxima prioridad para el gobierno americano. Marruecos está al tanto de esta situación y no duda en beneficiarse de ella. El Reino de Marruecos ha sabido desarrollar una serie de alianzas, relaciones militares y más acuerdos gracias a la importancia que demuestra esta zona en la geoestrategia global.

Banderas de marruecos y Argelia.

Inicio del conflicto entre Marruecos y Argelia

EN 1962 Argelia se independiza de Francia tras una guerra que dura 8 años. Argelia contó con la ayuda de la URSS. La Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas colaboró mediante formación, financiación y entrega de armamento al Frente de Liberación Nacional(FLN). El partido FLN, mediante el uso de su brazo militar, lideró la Independencia de Argelia. En 1963 se da un hecho que marcará la geoestrategia de la región hasta el día de hoy. En ese año estalla la guerra entre Marruecos y la recién independizada Argelia. Marruecos quiso aprovechar que el territorio argelino ya no estaba bajo control francés y se propuso recuperar los territorios que pertenecieron al «Gran Marruecos». El país Alauita se refiere al «Gran Marruecos» como su objetivo de recuperar los territorios que le fueron «arrebatados» con la ocupación colonial de África. Entre ellos están el Sahara, los territorios españoles en el norte de África y las zonas en conflicto con Argelia.

La recién independiza Argelia recibió el apoyo de la URSS, Cuba y de la República Árabe Unida. La guerra finaliza un año después sin acuerdo sobre las fronteras. EE. UU. vio la ocasión de posicionarse con más fuerza en la zona, obligada por los objetivos de la URSS en el norte de África, a la vez que demostraba su compromiso con su aliado, Marruecos. Marruecos fue el primer país del mundo en reconocer la Independencia de EE. UU. y desde ese momento mantienen relaciones bilaterales que han sido fortalecidas con el tiempo.  La relación entre Marruecos y Argelia ya no volverá a ser la misma. Como en muchas otras zonas del planeta, los intereses de EEUU y la URSS se enfrentaron.

Marcha verde, ejemplo de guerra híbrida.

La colaboración de EE. UU. con Marruecos para invadir el Sáhara mediante guerra híbrida

En 1975 se da otra escalada bélica con la invasión de Marruecos del Sáhara Occidental, que como explicamos antes, consideraba esta zona parte de su territorio. El país Alauita aprovechó la retirada de España de este territorio y se decidió a invadirla usando a la población civil como arma híbrida, La Marcha Verde. El movimiento militar de Marruecos recibió ayuda de EE.UU. El país americano ayudó a asestar un duro golpe a los intereses de Argelia en la zona, por ende, a los de la URSS. Marruecos demostró una vez más, como no duda en utilizar a las personas como parte de la guerra híbrida.

Desde 1975 el principal objetivo de Marruecos ha sido buscar el reconocimiento internacional del Sáhara como parte de su territorio. Un apoyo que recibiría de su aliado EE. UU. en 2020 con los Acuerdos de Abraham. En ese año Donald Trump, como máximo representante de EEUU, reconoce el Sáhara Occidental como parte de Marruecos. A cambio Marruecos considera a Israel un estado soberano. Además, Israel se compromete a sumarse a EE.UU en facilitar armamento militar de primer nivel al país Alauí. Esta triple Alianza supuso una amenaza a Argelia y a los intereses de Rusia en la región.

El gas, la respuesta de Argelia a los acuerdos entre EE. UU. y Marruecos sobre Israel

Los acuerdos geopolíticos de Marruecos con EE. UU. e Israel no pasaron desapercibidos en Argelia. El gobierno argelino, de la mano de su aliado ruso, elaboraron una estrategia para dañar a Marruecos. El 1 de noviembre de 2021, Argelia, deja de suministrar gas a España a través del gaseoducto Magreb-Europa. Esta acción por parte de Argelia buscaba dos objetivos. Dejar de pagar gas a Marruecos en concepto de ocupación de terreno por el gaseoducto. Y dos, provocar una crisis energética en Marruecos, el país Alauita usaba ese gas para producir electricidad.

Rusia y Argelia, la alianza del gas

Debemos tener en cuenta que Argelia tiene una característica, que de la mano de su aliado ruso, que disparada su importancia. Argelia y Rusia son dos de los tres principales suministradores de gas a Europa. Estas naciones saben que coordinando sus operaciones gasistas pueden poner contra las cuerdas a Europa. Esta es una razón más para que la Unión Europea reflexione sobre sus aliados.

EE.UU. es consciente de esto y por eso busca promover el uso de gas licuado en Europa. Aparte de ser uno de los mayores productores de gas del mundo, EE. UU. busca con este movimiento expulsar a Rusia y Argelia del mercado de gas europeo.

1 comentario en «EE. UU. y Marruecos contra Rusia y Argelia. Geopolítica, guerra híbrida y gas»

  1. La geopolítica de esos cuatro países acaba perjudicando a España. Periódico geopolítica, interesante mostrará como Marruecos gana la partida de la geopolítica a su vecino europeo. Y también como Rusia juega su papel en la geopolítica frente a eeuu.

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