España en los últimos años ha descuidado su geopolítica. Tanto los de un color como los del otro. La geopolítica se ha tenido como algo secundario por la mayoría de los políticos de nuestro país. Y tras llegada de la pandemia, que ha provocado un cambio sustancial de las relaciones internacionales, se ven las consecuencias de no cuidarla. España ha quedado relegada a un plano secundario en la agenda internacional y eso se ve en los ataques que recibe.
Marruecos ha cuidado su geopolítica y ahora se permite desafiar a España
El Reino de Marruecos ha sabido tejer una amplia telaraña de acuerdos dónde hace valer su posición geoestratégica. Ha explotado su situación el sur de Europa para presionar a la UE en materia de emigración y terrorismo obteniendo financiación. A mayores disfruta de acuerdos bilaterales con países como España en materia de emigración, que a la vez que le presiona sus fronteras, le saca material militar para presuntamente defenderlas. También se ha reunido oficialmente con el V4, el denominado grupo de Visegrado. Ha tejido acuerdos en materia de ciberseguridad con Reino Unido. Además, ha desarrollado acuerdos comerciales con China. Y ha fraguado una fuerte alianza con EE. UU. e Israel.
Marruecos ha sabido posicionarse como un aliado principal de EE. UU. frente a los intereses de Rusia en Argelia. Esta tensión es la extensión de la vieja y nueva guerra fría que llega hasta el norte de África. Dónde las dos superpotencias, al igual que en muchos otros territorios del planeta, rivalizan por el control de la región. Por un lado, EE. UU. es un aliado del gobierno marroquí, por otro lado, Rusia es un aliado del gobierno argelino.
Marruecos ha conseguido a través de la geopolítica vender su posición estratégica. Esto le ha posibilitado acceder a material militar de primer nivel, y lo más importante, un importante aliado de EE. UU. Esta situación, sumada a la imagen de debilidad que tiene España en la agenda internacional, le permite avanzar a sus objetivos expansionistas. Marruecos a través de la guerra híbrida y guerra económica, está dañando a España. Su objetivo final es invadir los territorios españoles en el norte de África. Una fuerte posición en la geopolítica internacional permite avanzar en los objetivos de cada país.
Ejemplos de guerra híbrida y económica que Marruecos aplica contra España
En Europa viven millones de marroquís que tradicionalmente usaron España como acceso para volver a su país. Todos los años Marruecos organiza la vuelta, visitas o vacaciones de sus compatriotas de Europa que vuelven a casa. Pues en el año 2021, Marruecos negó las licencias a España, para la vuelta de los ciudadanos marroquís a su país por los puertos españoles. Esto supuso un importante golpe a la economía española, ya que hasta ese año los centenares de miles de marroquís que cruzaban España, dejaban grandes ingresos a su paso por el país. El 6 de febrero, el gobierno marroquí, confirmaría que en el año 2022 los ciudadanos marroquís tampoco pasarían por los puertos españoles. Marruecos ha dado licencia a los puertos franceses e italianos frente a los españoles. Marruecos ha aplicado y espera repetir el daño generado con su guerra económica contra España.
En el mes de mayo de 2021 asistimos como miles de personas entraban en Ceuta de manera ilegal. Marruecos puso en marcha una acción de guerra híbrida contra las fronteras españolas usando a civiles. A muchos nos vino a la cabeza la Marcha Verde de 1975 dirigida por Hassan II, padre del actual rey de Marruecos. La marcha movilizó a más de 300.000 personas y 10.000 militares con la idea de invadir el Sáhara Occidental y acceder a sus recursos. Marruecos no dudó en utilizar a su población como arma híbrida y lo ha vuelto a repetir. ¿Cuál ha sido la respuesta de España? Ninguna, un paso más en la imagen de debilidad internacional.
EEUU también muestra la falta de posición internacional de España
Muestra de las buenas relaciones que mantienen Marruecos y EE. UU. y que no dudan en exponer ante las costas españolas. Se mostró en el comunicado del 15 de diciembre emitido por la Sexta Flota de EE. UU. «¡El mejor barco es la amistad! ¡El Harry S. Truman se asoció con la fragata clase Sigma de la Marina Real de Marruecos, para transitar por el Estrecho de Gibraltar y entrar en el Mar Mediterráneo!» El comunicado es acompañado por fotos de la flota estadounidense cruzando el estrecho de Gibraltar.
Este comentario fue publicado por la flota de EE. UU. en medio de ejercicios militares con Marruecos. Casualmente en las fotos que acompañan al escrito, se podía ver al fondo España. Esta situación demuestra que el país africano lleva la delantera en las relaciones con EE. UU. y ello permite avanzar hacia su objetivo. Además, EE. UU. con esa provocación a España, que por supuesto no obtiene respuesta, consigue debilitar más aún la imagen española en el mundo.
Otra muestra por parte de EE. UU. de la poca importancia geopolítica de España, en estos momentos, la vemos en el conflicto de Ucrania. Varios dirigentes europeos ya han tenido reuniones con Putin, una posible reunión con Pedro Sánchez ni se espera. EE. UU. ha relegado a España a una posición secundaria en el conflicto con Rusia, alejándola de las reuniones de primer nivel.
El presidente de México, otro ejemplo de debilidad de España
Andrés Manuel López Obrador(AMLO) ha elegido a España como «cortina de humo» para tapar su gestión. Parte de México se encuentra sumida en una guerra entre narcotraficantes que provoca matanzas casi a diario. Los asesinatos de periodistas son habituales y la situación económica empeora. AMLO «ha olido sangre» en la debilitada imagen de España y ha pedido «una pausa» en las relaciones entre los países, «No queremos que nos roben». ¿El dirigente mexicano haría estas declaraciones de Francia? Obviamente hay que tener en cuenta la relación histórica entre España y México, pero si España gozara de una fuerte imagen internacional, no se atrevería a decirlas.
Interesante análisis de la geopolítica española. Podrías realizar otro incluyendo más países para poder conocer las relaciones. Y muy interesante lo de la guerra híbrida y guerra económica de Marruecos. Como periódico geopolítica está bien.