El 30 de agosto de 2022 falleció Mijaíl Sergueievich Gorbachov, último presidente de la URSS, uno de los líderes políticos más relevantes del siglo XX. Ha sido, sin embargo, un personaje controvertido que ha sido ensalzado en Occidente y criticado en Rusia, especialmente por los nacionalistas. Entre sus críticos figuran instituciones como Vladímir Putin, que lo considera un traidor a la patria rusa por ser el responsable de la disolución de la Unión Soviética. No debemos olvidar que en el actual conflicto de Ucrania, es un ejemplo de ello para el Kremlin. El actual líder ruso busca recomponer como «zonas de transición» o «países tapón», territorios que formaban parte de la URSS, como el caso de Ucrania.
Gorvachov, clave en conducir al mundo del período de la Guerra Fría al de la era post-Guerra Fría
Mijaíl Sergueievich Gorbachov debe ser recordado como una figura fundamental que dio comienzo a una nueva era. Cambió el rumbo de la historia al reformar la URSS y acercarla a Europa, puso en marcha un proceso de modernización del país y adoptó una actitud pacífica con Estados Unidos para que las dos grandes potencias cooperaran. Gestionó de forma pacífica la transformación y la disolución de la URSS, la caída del Muro de Berlín y la reunificación alemana y fue clave en conducir al mundo del período de la Guerra Fría al de la era post-Guerra Fría.
Gorbachov defendía un modelo de democracia liberal adaptada a los tiempos, buscando la apertura de Rusia al mundo, tan en el plano económico, social o cultural. Mijaíl, de una manera similar a Juan Pablo II, buscaban una apertura y conciliación del ideario marxista-leninista del Partido Comunista de la Federación de Rusia(PCUS). Cierto es, que era una misión casi imposible, el PCUS dominaba las estructuras políticas, económicas y sociales del país.
El intento de reforma de la URSS
Gorbachov era consciente de que la URSS no podía continuar como un sistema cerrado, e intentó una reforma prudente que no liquidase a la Unión Soviética, sino haciéndola compatible con el creciente orden liberal internacional. La estatalizada economía producía numerosos cuellos de botella que no permitían el desarrollo económico ni el desarrollo social. La guerra en Afganistán y el régimen represivo existente incidieron en el descontento creciente de la población. Gorbachov pensó que podría regenerar el sistema desde arriba, intentando liberalizar y humanizar el sistema marxista-leninista de la URSS. La nueva política generó unas tensiones que el líder no fue capaz de encauzar, su proyecto quedó dinamitado y llevó, en último término, a la disolución de la URSS.
Su política estuvo simbolizada en dos palabras: “perestroika”, reestructuración económica, y «glasnost”, transparencia.
Llegada al poder de Gorbachov
Nació el 2 de marzo de 1931 en Privólnoie (Krai de Stávropol), cerca del Cáucaso, en la RSFS de Rusia, en el seno de una familia campesina. Entró a la Unión Comunista de la Juventud (Komsomol) en 1946. En 1950 empezó a estudiar en la Universidad Estatal de Moscú, ingresando en 1952 en el Partido Comunista de la Unión Soviética (PCUS). Entre 1955 y 1962, desempeñó los cargos de primer secretario del comité del Komsomol de Stávropol y del krai de Stávropol. En 1970, fue ascendido a jefe del departamento del comité territorial del PCUS de Stávropol. En 1968, fue elegido segundo secretario del comité territorial del PCUS y en 1970 pasó a ocupar la primera secretaría de dicho comité.
Protegido por Fyodor Kulakov y Yuri Andropov, accedió en 1971 al Comité Central del PCUS y en 1980 al Politburó, comisión política del Comité Central del Partido Comunista de la extinta Unión Soviética. En 1985 fue nombrado secretario general del PCUS y en 1990 presidente de la Unión. Desde ese momento intensifico la política de “desestalinización”, iniciada por Kruschev, para reducir la dependencia estatal de la economía. Entre sus primeras medidas destacan:
Abrió pasó a la propiedad privada en las empresas de servicios, la industria manufacturera y ciertos sectores de la agricultura y del comercio exterior.
Promulgación de la «glasnost»
Abría el camino a la libertad de expresión, de prensa y de culto. Además, acabó con el monopolio del PCUS mediante una reforma constitucional que abría el camino al multipartidismo, promovió elecciones libres, estableció una República presidencialista, y puso fin a la era de terror y de opresión impuesta por sus antecesores. No pretendía acabar con el sistema comunista, sino reformarlo, pero las importantes transformaciones que introdujo desarticularon la estructura sociopolítica del país, sin llegar a sustituirlas por un sistema plenamente democrático, lo que produjo contradicciones e ineficiencias.
Estas reformas eran necesarias para homologar el régimen soviético con el europeo, pero no surtieron efecto a corto plazo y produjeron considerable malestar y descontento en la población. Gorbachov se encontró en medio del fuego cruzado entre los comunistas, que se oponían a cualquier cambio, y los conversos demócratas, que encontraban que las transformaciones requeridas se realizaban a un ritmo demasiado lento, y procuró mantener una posición equidistante que no convencía a ningún grupo.
Chernobyl
Gorbachov tuvo que enfrentarse a las trágicas consecuencias del accidente nuclear en la central de Chernóbil.
Afganistán
Gorbachov se encontró al Ejército Rojo empantanado y desmoralizado en Afganistán, ordenó la retirada de las tropas
La reestructuración de la URSS, el gran problema de Gorbachov
Las libertades concedidas y la renuncia a la imposición por el terror hicieron que resurgiera el sentimiento nacionalista. Gorbachov se negó al principio a acceder a las demandas de mayor autonomía e independencia para las Repúblicas Asociadas.
Independencia de Estonia, letonia y Lituania en 1991
Gorbachov acabó aceptando la independencia de las Repúblicas Bálticas debido a que eran Estados anteriormente independientes que fueron invadidos por la URSS durante la II Guerra Mundial. Además, se vio obligado jurídicamente, ya que conforme lo establecido en los artículos 72 de la Constitución- “cada una de las Repúblicas mantendrá el derecho a separarse libremente de la URSS”.
Referéndum del Tratado de la Unión e intento de golpe de estado
Gorbachov, para intentar mantener el resto de la URSS, elaboró el Tratado de la Unión, precedido de un referéndum celebrado el 17 de marzo, en el que el 76% del pueblo votó a favor. Buscaba una URSS 2.0 que se preservara la Unión como una federación renovada de Repúblicas soberanas e iguales en la que se respetarán los derechos y las libertades de los pueblos de todas las nacionalidades. El tratado debería haberse firmado el 20 de agosto, pero un día antes se produjo un intento de golpe de Estado por parte de los elementos más radicales del PCUS y la KGB, que -aunque no tuvo éxito- dejó a Gorbachov en una situación muy precaria y fortaleció la posición de Boris Yeltsin, que había abandonado el Partido y había sido elegido presidente de la Federación de Rusia.
El Acuerdo de Belovesh
Ucrania y Bielorrusia se negaron a firmar el Tratado. A espaldas de Gorbachov, los presidentes Yeltsin, Kravchuk y Shushkevich firmaron el 8 de diciembre el Acuerdo de Belovesh, que derogó la Constitución de 1977 en los territorios de la URSS y declaró su desaparición como sujeto de Derecho Internacional. Se decidió asimismo crear una Comunidad de Estados Independientes (CEI), que fue adoptada unos días más tarde por todas la República, menos los Estados bálticos y Georgia, mediante el Protocolo de Alma-Ata.
Protocolo de Alma-Ata
El Protocolo de Almá-Atá fue la creación de las declaraciones y principios fundacionales de la Comunidad de Estados Independientes (CEI). Fue firmado el 21 de diciembre de 1991 por los presidentes de 11 de las 15 repúblicas de la Unión Soviética.
El fin de Gorbachov
El 25 de diciembre, Gorbachov presentó su dimisión como presidente de la extinta Unión Soviética. Afirmó, dada la situación creada con la formación de la CEI, cesaba en sus actividades como presidente de la Unión, decisión que tomaba por razones de principio, dado que se había impuesto la desmembración del país y la desunión del Estado, lo que no podía aceptar. “Hoy estoy de acuerdo con la razón histórica de los cambios iniciados en 1985. Hemos acabado con la Guerra Fría, se ha detenido la carrera armamentista y la desmilitarización del país, que había deformado nuestra economía, nuestra conciencia social y nuestra moral. Nos abrimos al mundo, que nos ha respondido con confianza, solidaridad y respeto”.
Gorbachov y la libertad
Gorbachov dejó constancia de que la sociedad rusa había conseguido su objetivo más preciado -la libertad-, el sistema totalitario había sido liquidado, y las transformaciones democráticas eran irreversibles y los derechos humanos respetados.
Responsables de la caída de la URSS
Junto a Gorbachov, los principales responsables fueron Kravchuk, Shushkevich y -sobre todo- Yeltsin. Yeltsin promovió la desintegración de la URSS para sustituir a Gorbachov al frente de la Federación de Rusia, pensando que, a través del control del CEI, lograría reconstituir una URSS a su medida.
Gorbachov en la política internacional
Gorbachov sacó a la URSS de su aislamiento, la acercó al mundo occidental, abolió la Doctrina Brezhnev de la soberanía limitada y renunció a imponer sus dictados por la fuerza a las Repúblicas que formaban parte de la Unión y a los Estados comunistas asociados en el Pacto de Varsovia. Además, Gorbachov advirtió a sus colegas comunistas que no contaran con el Ejército rojo para dominar las eventuales revueltas y protestas en sus territorios, como había ocurrido con Hungría en 1956 y con Checoslovaquia en 1968.
La política exterior de Gorbachov condujo al fin del sistema bipolar e hizo posible la unificación alemana y la democratización de la Europa central y oriental, y permitió eliminar los euromisiles instalados en tierra, reducir los arsenales convencionales. La URSS se vio superada tecnológica y financieramente por la iniciativa de Donald Reagan denominada “Guerra de las galaxias” y -fuera por convicción o por hacer de la necesidad virtud- Gorbachov se convirtió en un adalid del desarme y concertó con Estados Unidos acuerdos internacionales como los Tratados sobre fuerzas nucleares de tamaño intermedio o de reducción de armas estratégicas (START).
Doctrina Brezhnev
Significaba efectivamente que si un país trataba de «pasar del socialismo al capitalismo» se generaba un problema político que no solo era competencia del Estado comunista así afectado, sino que debía entenderse que todos los demás países bajo un régimen comunista debían considerarse afectados por esta situación. De hecho, esta doctrina justificaba una intervención del Pacto de Varsovia en dicho país donde aparecieran las «fuerzas hostiles al socialismo». El hecho que la «doctrina» fuera formulada en un artículo de Pravda y no en una cumbre internacional fue considerado como una señal de que la URSS se atribuía el derecho a fijar los límites y alcances de la nueva doctrina.
Pacto de Varsovia
En 1955 la URSS responde a la creación de la OTAN con la firma del Pacto de Varsovia. El Tratado de Amistad, Colaboración y Asistencia Mutua, conocido Pacto de Varsovia, fue un acuerdo de cooperación militar firmado el 14 de mayo de 1955 por los países del bloque del Este durante el periodo conocido como Guerra Fría. Diseñado bajo el liderazgo de la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS), su objetivo expreso era contrarrestar la amenaza de la OTAN, y en especial el rearme de la República Federal Alemana, a la que el tratado fundacional de la Comunidad Europea de Defensa permitía reorganizar sus fuerzas armadas.
El Pacto de Varsovia estaba formado por: la URSS, Albania(se retiró en 1968), la República Democrática Alemana(Alemania Oriental se retiró del Pacto tras la reunificación en 1990), la República Popular de Bulgaria, la República Socialista Checoslovaca, la República Popular de Hungría, la República Popular de Polonia y la República Socialista de Rumanía. Además, de los observadores: la República Popular China (se retiró en 1961), Corea del Norte y la República de Mongolia(se retiró en 1992).
No hubo enfrentamiento militar directo entre las dos organizaciones. En cambio, el conflicto se libró sobre una base ideológica y mediante guerras subsidiarias. Tanto la OTAN como el Pacto de Varsovia llevaron a la expansión de las fuerzas militares y su integración en los respectivos bloques.
La Iniciativa de Defensa Estratégica “Guerra de las galaxias”
La Iniciativa de Defensa Estratégica es el programa militar del Departamento de Defensa de los Estados Unidos cuyo objetivo es construir un sistema defensivo con armas espaciales capaz de prevenir un ataque nuclear ante territorio norteamericano contra armas nucleares estratégicas (misiles balísticos intercontinentales y misiles balísticos lanzados desde submarinos). El concepto fue anunciado públicamente por primera vez el 23 de marzo de 1983 por el Presidente Ronald Reagan,1 y un crítico vocal partidario de la doctrina de la destrucción mutua asegurada describió el proyecto como un «pacto suicida», e instó a los científicos y a los ingenieros norteamericanos a que desarrollaran un sistema que hiciera obsoletas las armas nucleares.
Muro de Berlín y reunificación alemana
Gorbachov se negó a apoyar la política represiva de Eric Honecker, en la Alemnai Oriental, y éste tuvo que dimitir, abriendo paso a la remoción del Muro de Berlín y a la reunificación de las dos Alemanias en 1989. Ello supuso una grieta abierta en la infraestructura militar de los países socialistas, llevó a la disolución del Pacto de Varsovia e influyó en la desintegración de la URSS. El presidente alemán Frank-Walter Steinmeier alabó públicamente la actuación de Gorbachov, cuando le dijo: “Nunca olvidaremos que el milagro de la reunificación pacífica de mi país y el fin de la división de Europa no habrían sido posibles sin las decisiones valientes humanas que tomó usted personalmente”.
¿Cómo ve Putin a Gorbachov?
Putin estima que la disolución de la URSS ha sido la mayor catástrofe geopolítica del siglo XXI y menosprecia a su predecesor, a quien considera un menguado y un traidor. De ahí que le haya negado la celebración de un funeral de Estado y no haya asistido a su entierro. Esta opinión sea compartida por buena parte del pueblo ruso. Prueba de ello es que, cuando en 1996 se presentó a las elecciones presidenciales, apenas logro el 2% de los votos.
Es innegable que Gorbachov introdujo importantes reformas demócraticas, acabó con la Guerra Fría y consiguió más libertad para su país. Occidente solo puede recordarlo con agradecimiento.
De todas formas, hay que tener en cuenta que Rusia también sufrió las consecuencias de sus errores