El gobierno de Italia, encabezado por Mario Draghi, ha puesto en marcha una completa estrategia para buscar la independencia energética de Italia respecto al gas ruso. Debemos tener en cuenta que cada vez es mayor la presión de EEUU y Ucrania a la UE, para dejar de comprar materias primas energéticas rusas. Gazprom vende anualmente 29.000 millones de metros cúbicos de gas en el país, el 40% de las importaciones nacionales.
Ante esta situación, Italia ha puesto en marcha una política energética respecto al gas, centrada en tres puntos. En primer lugar, aumentar la llegada de gas por gaseoducto, especialmente de Argelia. En segundo puesto, diversificar proveedores y buscar nuevos países que garanticen nuevas fuentes de importación. Y la tercera clave, el desarrollo de plantas regasificadoras y la búsqueda de la llegada de barcos de GLP, para asegurar el suministro.
Italia y el gas de Argelia
El primer ministro de Italia, Mario Draghi, anunció en su visita a Argel del 13 de abril de 2022, un acuerdo de cooperación estratégica basado en un aumento de la importación de gas desde el país vecino. Eni, empresa italiana de hidrocarburos, y Sonatrach, empresa de hidrocarburos de Argelia, han acordado aumentar la exportación de gas a Italia. Lo harán a través del gasoducto que comparten, el Transmed, con el objetivo de para garantizar una mayor flexibilidad de los suministros de energía. El objetivo sería llegar a la compra de hasta 9.000 millones de metros cúbicos de gas por año en 2023-24, a través del Transmed.
El dirigente italiano aprovechó la crisis diplomática entre Argelia y España, para posicionarse como socio predilecto del país africano. Las relaciones entre Argelia e Italia han sido constantes en los últimos meses, al tiempo que se deterioraban con España. Argelia es el principal aliado del Frente Polisario y Rusia en la región y el enemigo de Marruecos. España, tras la declaración sobre el Sáhara Occidental, se ha posicionado del lado marroquí y de EEUU. Mario Draghi ha aprovechado la situación para extender las relaciones con Argelia, a la vez que se beneficia de un aumento del gas.
Nuevos proveedores: Egipto, Angola y Congo
Otra de las claves que está llevando a cabo Italia, es acelerar la diversificación de los países que exportan gas al país. Italia y Egipto han firmado el pasado 13 de abril un acuerdo para el suministro del equivalente a tres mil millones de metros cúbicos por año en forma de gas licuado (GNL). Mario Draghi se ha asegurado una cláusula en la que podrían realizar mayores compras de gas a Egipto, en caso de necesidad. Las iniciativas italianas, sin embargo, no parecen detenerse ahí.
Italia está llevando a cabo contactos con el Congo y Angola para concluir nuevos acuerdos de suministro de gas licuado. se espera que estén firmados, probablemente, la próxima semana. El equivalente a otros cinco mil millones de metros cúbicos de gas debería poder llegar desde los campos del Congo, la mitad ya este año y la mitad a partir del próximo año. El equivalente a 1.500 millones de metros cúbicos debería poder llegar desde Angola. Para entonces, Italia ya habría reemplazado al menos dos tercios de los suministros rusos y estaría casi lista para romper las relaciones comerciales con el Kremlin.
La tercera clave, la regasificación
Parte del gas que Italia espera comprar a Argelia, llegará en barco en forma de GLP. Al igual que los suministros que se esperan de Egipto, Angola y Congo. Ante esta situación, Italia ha puesto en marcha un plan para aumentar la capacidad y cantidad de plantas regasificadoras en el país. Además, para poder actuar a corto plazo, se están construyendo dos plantas de regasificación flotantes, que deberían aumentar precisamente esta capacidad en diez mil millones de metros cúbicos.
Mientras Sánchez sólo logra traer gas en forma de GLP(40%más caro) a Italia lleva cuatro acuerdos. Será un oportunista con lo de Argelia pero eso puede salvar miles de despidos de la industria italiana por menores costes energéticos.