El conflicto de Yemen no da síntomas de agotamiento, al contrario, los ataques llevados a cabo por los Hutíes con el apoyo de Irán se extienden. El conflicto de Ucrania marca la actualidad geopolítica, pero el duelo entre las grandes potencias regionales, Arabia Saudí e Irán, no cesa en Yemen.
Debemos conocer que el enfrentamiento de Yemen es uno más en el que Arabia Saudí e Irán se disputan la hegemonía militar, social y religiosa en Oriente Medio. La población de Yemen está formada en un 53% por suníes y 46,9 % por chiíes. Esto convierte a Yemen en un objetivo, por ambas partes, para intentar incluir a este país en sus correspondientes bandos. Además, se debe tener en cuenta que aparte de las diferencias religiosas en este país, hay movimientos independentistas e islamistas que dificultan la situación de Yemen.
¿Quiénes son las partes en el conflicto?
Hutíes, Congreso General del Pueblo y Alí Abdalá Salé
Los hutíes son un movimiento insurgente chiita que lucha en la guerra de Yemen. Nace en los primeros años de 1980 como resistencia frente al expansionismo religioso de Arabia Saudí. De carácter religioso en un principio, pasa a milicia en el 2000. Se presume que Irán ve en este movimiento un potencial aliado contra Arabia Saudí, en su propia frontera. No se sabe con certeza cuántos años llevan las fuerzas iranís formando a este grupo rebelde, pero su dominio de la guerra asimétrica y del terreno, han terminado por formar a un ejército «profesional». Controlan los terrenos montañosos del oeste y norte de Yemen, dónde se han mostrado imbatibles hasta el momento. Los analistas cifran los efectivos de los Hutíes entre 150.000 y 200.000 combatientes.
El movimiento que hoy conocemos como Hutíes, se debe al clérigo Hussein Badreddin al-Houthi, del que toman nombre. Houthie se convirtió en líder del Chiismo Zaidí, al posicionarse en contra del expansionismo religioso de Arabia Saudí en Yemen. Rápido organizó el movimiento contra la influencia saudita, lo que le brindó la ayuda de Irán. En 2004, comenzaría acciones insurgentes contra el gobierno de Yemen. El gobierno central de Yemen está apoyado por Arabia Saudí. Las acciones que se dieron en 2004 enfrentarían a las fuerzas de Yemen contra los insurgentes, provocando la muerte de Hussein Badreddin al-Houthi. Tenía gran respaldo tribal en las zonas montañosas del noroeste de Yemen, tras su muerte, el movimiento chiita zaidí yemení pasaría a autodenominarse con su nombre, «Houthi», hutíes.
En 1982 se funda el Congreso General del Pueblo, único partido que controlaba Yemen del Norte, dirigido por Alí Abdalá Salé. En 1990 se crea Yemen, con la fusión de Yemen del Norte(Zayditas Chiíes) y Yemen del Sur(Sunís). El nuevo Yemen sería dirigido por Alí Abdalá Salé. Alí Abdalá Salé gobernó el país durante 21 años hasta 2011. En 2011, con las Primaveras Árabes, se dan multitudinarias protestas que le llevan a dimitir. Aquí está la clave que marcará el inicio del conflicto en 2014. Salé, era un dirigente Zaydista Chíita afín a Irán, se piensa que Arabia Saudí y sus aliados, aprovecharon las revueltas para sacarlo del poder. Tras el fin de las protestas, accede al poder Abd al-Rahman Rabbuh al-Mansur al-Hadi, líder sunita y afín a Arabia Saudita.
Abd al-Rahman Rabbuh al-Mansur al-Hadi, «Yemen del Sur»y Al-Qaeda
Al-Hadi fue el presidente elegido tras la dimisión de Salé. El acceso al cargo de Al-Hadi creó una gran polémica entre Zayditas Chiíes, mayoritarios en el norte de Yemen y sunitas mayoritarios en el sur de Yemen. La guerra civil en Yemen comienza en 2014 con un golpe de estado. La complejidad de esta guerra se observa en los tres bandos que se forman y en la intervención internacional. Al comienzo de la guerra se enfrentaban los partidarios del presidente Rabbuh al-Mansur al-Hadi y sus aliados independentistas del «Yemen del Sur». En el bando de los golpistas tenemos al «Yemen del norte»: los hutíes y a los seguidores del presidente anterior, Alí Abdalá Salé. Y enemigos de todos ellos, Al-Qaeda. A estos tres bandos hay que sumar la extensión del conflicto geopolítico más importante de Oriente Medio, Arabia Saudí contra Irán.
Arabia Saudí, Irán y aliados
Arabía Saudí e Irán son rivales inconciliables. Su enemistad es total y se enfrentan en todos los campos: religioso, militar, social, territorial… Su objetivo es mutuo: posicionarse como líderes regionales dominando los países islámicos. La lista de enfrentamientos es interminable: guerra de Siria, rebelión en Baréin, guerra de Iraq contra el Estado Islámico o la Guerra de Yemen por ejemplo. Parte del éxito de las tropas rebeldes encabezadas por los Hutíes, se debe a la formación y armamento facilitado por Irán y aliados. Muestra de ello es que a 2022 los rebeldes siguen batallando contra una gran alianza internacional. Irán es un especialista en la guerra asimétrica, ante enemigos más numerosos y mejor armados, es capaz de resistir y debilitarlos. Y eso es lo que aplica a través de los Hutíes en Yemen, con la ayuda de sus aliados de: Hézbola, grupos palestinos, milicias iraquíes y Qatar.
En 2015 Arabia Saudí convocó el Consejo de Cooperación para los Estados Árabes del Golfo(CCEAG). La CCEAG está formada formado por Baréin, Kuwait, Omán, Catar, Arabia Saudita y los Emiratos Árabes Unidos. Además, cuentan con la ayuda junto a EEUU de: Marruecos, Sudán, Senegal y otros países como Francia o Alemania para apoyar. La operación Tormenta Decisiva fue puesta en marcha debido al avance de las tropas hutíes con la supuesta ayuda de Irán. La operación extranjera de apoyo al gobierno equilibró el conflicto, pero no consiguió decantarlo, debido al conocimiento del terreno y preparación de las tropas hutíes.
No se debe subestimar a los Hutíes y a Irán
Se tiende a pensar que los Hutíes e Irán no pueden hacer nada contra el gran y poderoso número de aliados de Arabia Saudí. Pero esto no es así, un ejemplo de ello es el ataqué a Emiratos Árabes Unidos por parte de los Hutíes. El ataque contra el aeropuerto de Abu Dabi es en respuesta a al avance de las tropas internacionales de principio de enero. Las tropas encabezadas por los (EAU) anunciaron avances, en la Guerra de Yemen, los primeros días de enero de 2022.
La respuesta no se hizo esperar y a través del portavoz de los militares hutíes se informó que «estamos preparados para la nueva embestida del enemigo emiratí». Días después de estas declaraciones se produce el ataque contra el aeropuerto de Abu Dabi, demostrando que los hutíes tienen capacidad de respuesta. Debemos tener en cuenta que no es el primer ataque de los hutíes fuera del territorio por el que pelean. Los hutíes, en una jugada de geoestrategia, han llevado la guerra a territorio saudí y han demostrado que pueden también hacer daño a los emiratís en su propio país.
Para finalizar vamos a mencionar un dato que evidencia el poder y capacidad de Irán en aguantar el duelo contra Arabia Saudí y todos sus aliados. En 1980 Irán, aliado actual de los hutíes, uso en la guerra con Iraq un dron cargado con siete misiles. Es considerada la primera vez que se utilizó un dron de combate en la guerra. La capacidad de resistencia de Irán es destacable.
Es interesante periódico geopolítica hablar de Yemen. La geopolítica de Ucrania no es todo y la alianza que combate en Yemen contra los poderosos Hutíes, es heterogénea. Destacable como Irán juega sus cartas en la guerra asimétrica y como lo usa para su geopolítica. La victoria de los aliados de Irán en Iraq supuso la promoción de los comandos de Irán. Saben jugar su geopolítica.
Ojalá podáis seguir con los artículos sobre Yemen y el Sahel. Son zonas de geopolítica de actualidad que se han olvidado en otros medios y vosotros seguís. Así que esperando el siguiente.