El jueves 31 de marzo de 2022 se producía un hecho histórico, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, anunciaba la emisión al mercado de petróleo, de un millón de barriles al día durante seis meses. Esta medida forma parte de un paquete de iniciativas, por parte del gobierno de EE. UU., para bajar el precio del crudo, que estaría cerca de un 70% más caro que hace un año. La magnitud de la iniciativa, la liberación de 180 millones de barriles de las reservas estratégicas petrolíferas, no tiene precedentes en esas cantidades. Además, hizo un llamamiento a la industria petrolífera del país, para que comience a explotar los 9.000 permisos para perforar ya aprobados. Y por último, un plan para impulsar las energías renovables y la eficiencia energética.
El 14 de junio de 2022, el Departamento de Energía de Estados Unidos informó que pondrá en el mercado otros 45 millones de barriles de crudo de la Reserva Estratégica de Petróleo, ante las negativas perspectivas.
¿Qué son las reservas estratégicas?
El Fondo de Reserva Estratégico de Estados Unidos fue creado en 1975, después de que el boicot de países productores árabes desencadenase la primera crisis energética global. En sus instalaciones almacena casi 600 millones de barriles de petróleo en lugares secretos de Luisiana y Texas. Los presidentes del país pueden recurrir al fondo para calmar a los mercados en caso de guerra o cuando catástrofes naturales golpean infraestructuras energéticas.
Además, debemos tener en cuenta, que Estados Unidos es el mayor productor de petróleo del mundo, actualmente extrae 11,7 millones de barriles de petróleo diarios. Esta circunstancia sumada al hecho histórico del anuncio de liberar tanta cantidad de crudo, nos da una imagen de la gravedad y problemas que puede suponer para occidente los altos precios del petróleo.
¿Por qué EE. UU. ha tomado esta decisión sobre el petróleo?
Inflación
Estados Unidos ha presentado, en los últimos meses, una inflación histórica que no se veía desde los años ochenta. El precio medio de un galón de gasolina estadounidense, se ha disparado. Esta circunstancia, en una economía basada principalmente en el consumo de combustibles fósiles, puede destruir parte del tejido empresarial y abocar a un gran número de empresas a la quiebra. Además, de provocar un importante desajuste en las familias, que se ven obligadas a restringir el consumo, provocando la caída de la actividad empresarial.
Los motivos que han llevado a esta situación son los siguientes. En primer lugar, la prohibición nacional de importar petróleo ruso, que aunque equivalía al 8% de las importaciones totales, ha presionado los precios al alza. En segundo término, el miedo a la Guerra de Ucrania, ha disparado las compras internacionales de petróleo por parte de todos los países, lo que ha disparado su demanda y, por lo tanto, su precio. Tercero, el desajuste producido tras el Covid por la recuperación de la demanda mundial, que ha llevado a un estrangulamiento en las cadenas logísticas.
OPEP+
La OPEP es una organización que busca regular la producción y el precio del petróleo al coordinar los esfuerzos que hacen sus países miembros, por ejemplo, mediante el establecimiento de cuotas de producción. Los miembros de la OPEP participan en las negociaciones y se ponen de acuerdo respecto a la cantidad de petróleo exportado, lo que tiene una incidencia directa en el precio del barril. Sus miembros son: Argelia, Angola, Guinea Ecuatorial, Gabón, Irán, Irak, Kuwait, Libia, Nigeria, República del Congo, Arabia Saudita, Emiratos Árabes Unidos y Venezuela. Estos países controlan el 43% de la producción mundial de petróleo y el 81% de las reservas mundiales.
La OPEP, para aumentar su control sobre los precios del petróleo, estableció en el 2016 un acuerdo con otros 10 países productores: Rusia, México, Kazajstán, Azerbaiyán, Baréin, Brunéi, Malasia, Omán, Sudán y Sudán del Sur. La OPEP+, está controlada por Rusia y Arabia Saudí. Ante la petición de subir la producción de petróleo por aparte de EE. UU., estos se han negado. Debemos tener en cuenta que importantes miembros de la OPEP como Venezuela, Argelia, Libia o Irán son aliados de Rusia y saben que aumentar la producción beneficiaría a EE. UU. y sus aliados. Por este motivo han acordado, en su última reunión, mantener la producción estable.
El desafío de la OPEP+ a la AIE
Casualmente el anuncio de Biden, del 31 de marzo, se produjo antes de la reunión de la OPEP+. EEUU sabía que la OPEP+ no aumentaría destacablemente la producción. Mientras la AIE(agencia defensora de los intereses estratégicos de 31 naciones industrializadas) alerta de «un riesgo real» de que se produzca «la mayor crisis de oferta (petrolera) en décadas», la OPEP+ negó hoy cualquier escasez, y achacó el encarecimiento y la volatilidad de los precios exclusivamente a causas ajenas a su oferta. La OPEP+, no solo habían dejado claro que iban a hacer oídos sordos a las presiones para un aumento más sustancial de la producción de petróleo, sino que también defendieron la alianza con Rusia, que la OPEP forjó en 2016.
Se repite el desafío de la OPEP+ a Occidente
Lejos de aumentar su oferta de crudo, la OPEP+ redujo en mayo su bombeo hasta 28,51 millones de barriles diarios (mb). 176.000 barriles diarios menos que el volumen de crudo extraído en abril, según los datos publicados este viernes por el grupo de 13 países con sede en Viena. La producción de crudo «declinó en Libia, Nigeria, Irak, Gabón e Irán», admite la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP). Aunque la OPEP y sus aliados, entre ellos Rusia, acordaron incrementar sus suministros en mayo, de forma moderada, el documento revela que los aumentos de Arabia Saudí (en 60.000 barriles diarios), Emiratos Árabes Unidos (31.000 bd) y Kuwait (27.000 bd) no pudieron compensar la caída de los demás.
Arabia Saudí, más cerca de Putin que de Biden
La relación de Arabia Saudí con EEUU, ha cambiado sin Trump. Biden se alejó del reino tras la muerte de Yamal Jashogyi y los saudís echaron en cara a Washington la falta de ayuda en la Guerra de Yemen. A Riad le favorece unos precios elevados del petróleo, y Moscú se ha mostrado con «aliado» temporal fiable. Ambos países están disparando los ingresos por la venta de crudo, mientras Occidente sufre.
La gravedad de la crisis energética que afecta a EEUU y sus aliados, se puede ver en los últimos acercamientos de Washington a Venezuela, y su petróleo.
Lo tiene difícil eeuu aguantar el ritmo de a China con sus 1.300 milooe s de habitantes… Cómo se compite con un millón de superdotados que son obligados a ocupar puestos como ingenieros o similar…
Los europeos somos burros. Apoyar a EEUU es apoyar a la parte perdedora. Sólo 40 países apoyan a Ucrania, cuántos a China y Rusia?