El pasado 16 de octubre se llevaba a cabo el 40º Congreso federal del PSOE. En este acto se prepararon las bases del partido para las elecciones generales y autonómicas de 2023. El objetivo fundamental era dar una imagen de fuerza y unión frente al gran desgaste del gobierno. El miedo se siente en el PSOE y se esforzaron desde hace meses en preparar un gran acto. Movilizaron a todo el partido y lograron juntar a José Luis Rodríguez Zapatero y a Felipe González, a pesar de sus grandes diferencias.
El 2 de octubre se produjo la clausura del congreso Nacional del PP, al igual que el PSOE, no dudaron en mostrar todo su poderío. El conjunto de actos se centró en movilizar a todo el partido y a los expresidentes populares. Jose María Aznar y Mariano Rajoy no faltaron a la cita. El miedo también se hizo notar desde el primer momento, buscando la movilización de su estructura para dar la imagen de apoyo social.
PP y PSOE comparten incertezas sobre lo que puede pasar en las próximas fechas, y el miedo que mencionamos se debe al continuo avance de Vox. El partido verde está encontrando el terreno perfecto para sacar a pasear sus propuestas, los grandes partidos se movilizan ante el posible «momentum» de VOX.
Adelanto electoral
Cada día que pasa el gobierno actual pierde votos. La subida de la luz, que Pedro Sánchez dijo que bajaría, no deja de marcar máximos. El daño que provoca estos precios de la luz, a nivel macroeconómico, puede restar al rededor de un 1% del PIB. Pero los daños microeconómicos serán sobre los que caerá el posible adelanto electoral. Las noticias de familias que pasan frío al no poder pagar las facturas de electricidad. Las noticias de las familias que se suman a las colas del hambre, al tener que elegir entre comer o pagar las facturas. Y como indican los expertos, vendrá un año 2022 con un número de desahucios récords en los alquileres.
A estas situaciones que afectan en mayor o menor medida a toda la población, se suman a otras actuaciones de este gabinete. Que Sánchez dijera que no dormía tranquilo con Podemos en el gobierno y que ahora gobierne con ellos. La búsqueda de apoyos en ERC, PNV o Bildu dificulta que parte del electorado clásico de izquierda pueda volver a votar a este gobierno. La población de este país, sabe que el apoyo al gobierno del nacionalismo e independentismo es a costa de dar competencias que no dan a otros territorios, o a base de realizar inversiones que no hacen o quitan a otras zonas de España. La izquierda antinacionalista que representaban Campoamor o Anguita, verá en estos acuerdos la traición a la clase obrera en beneficio de la burguesía catalana y vasca.
Otra circunstancia que le quita votos a este gobierno es la imagen de «despilfarro» que muestra. Aumentar subvenciones a entidades afines, creación de órganos con dudosa utilidad, uso del avión privado, aumento de ministerios, etc. El gobierno debería repasar por qué Feijoo sacó su primera mayoría absoluta. El bipartito PSOE-BNG, anterior al primer gobierno de «o neno de Os Peares», compró un coche blindado para uso del presidente de la Xunta. Feijoo lo usó como ejemplo de despilfarro y mala gestión, el éxito fue notorio. Recortar y utilizar eficientemente los escasos recursos públicos es una de las razones de la consecución de cuatro mayorías absolutas del PP en Galicia.
La cuarta razón que presumiblemente llevará al adelanto electoral es el aumento de sensación de inseguridad en las calles. Consultando a fuentes policiales, se percibe un aumento delictivo por parte de bandas latinas y ciudadanos marroquís. El gobierno puede meter mano para solucionarlo o puede intentar esconder las cifras de procedencia de los delincuentes mediante regularizaciones como ha prometido. Esto sumado a las continuas provocaciones del gobierno de Marruecos contra España: asalto a Ceuta, llegada masiva de pateras a Canarias y Andalucía programadas por el gobierno, piscifactoría de las islas Chafarinas, anular contratos a Navantia y jactarse en las redes del daño económico causado a España. Todo esto el país vecino lo aplica a través de un plan diseñado que ejecuta a través de las estrategias híbridas. Además de las amenazas sobre los territorios españoles en la región. La polarización del voto va a ser elevada y la situación de inestabilidad geopolítica global puede llevar a modificar patrones de voto.
Datos del CIS
Cuándo estudiaba en la facultad, los profesores nos hablaban del CIS como uno de los organismos más respetados y que mejor funcionaban de España. Los profesores nos invitaban a usarlo como base de datos para nuestros trabajos y proyectos. Esto ha cambiado con José Félix Tezanos. En julio de 2018 dejó la Comisión Ejecutiva Federal del PSOE para centrarse en su nueva responsabilidad como presidente del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS). El PSOE puso a un miembro de su comitiva como presidente de un ente público, una práctica, lamentablemente habitual.
Lo primero es que destinar dinero público a realizar encuestas sobre partidos políticos, es cuestionable. Esta circunstancia muestra uno de los problemas de nuestro país, que los partidos políticos parasitan todo. El problema muestra su envergadura cuándo analizamos ayuntamientos, CCAA, y todo tipo de organismos públicos y encontramos un numero elevadísimo de cargos «puestos a dedo». A nadie ya nos sorprende los entresijos de Villarejo con el PP o el uso de bienes públicos (como la policía) para el beneficio de los partidos. PSOE y PP junto con los nacionalistas han echo de las administraciones partes indirectas de sus partidos.
Lo segundo es el uso de Tezanos de su cargo para promocionar su revista Temas y buscar réditos partidistas con sus artículos. ¿Cómo en plena jornada de reflexión de la Comunidad de Madrid publica un artículo dónde habla de la presidenta en los siguientes términos «escasa entidad intelectual y política de la candidata»? . La respuesta es la parasitación de todos los entramados del estado por los partidos políticos. Y lo peor es que esto no traiga consecuencias. El CIS anterior a las elecciones de la Comunidad de Madrid, daba un resultado bastante inferior al PP al que obtuvo en las urnas, ¡Qué sorpresa Tezanos!
Ayuso
No hace falta añadir un nombre a este apartado, cuándo nos referimos a ese apellido toda España y parte de la política internacional sabe a quién nos referimos. No sabemos cuánto durará el fenómeno Ayuso, pero la repercusión de esta líder regional no es habitual. Entrevistas en New York, la mencionan como referencia candidatos en Argentina, le piden entrevistas desde la TV nacional rusa y por supuesto la buscan todos los medios europeos.
Para analizar todo lo que ha llevado a crear el fenómeno Ayuso harían falta muchas páginas, por eso nos vamos a centrar en un valor que ha destacado en el PP. Su arrojo. Se enfrenta a la izquierda ya no sin miedo, sino que la desafía cara a cara y esto ha engatusado a mucha gente. Acostumbrados a los rudos ataques de la izquierda y al suave tono de Rajoy o Casado, la fuerza de Ayuso ha calado en gran parte de nuestro país. No se acobarda ante los ataques, sino que ataca más fuerte.
La presidenta ha sabido encajar los golpes y responder con frialdad contra todos los rivales que han ido a por ella. Desde la oposición de la Comunidad de Madrid, el gobierno de España, un gran número de periodistas y continuando por un gran número de medios de izquierda. Y este arrojo y aguante ha creado una figura de ella, que se expone como una persona fuerte que no titubea a la hora de tomar decisiones. Eso es lo que hace falta cuándo las cosas se ponen difíciles. Es una líder.
En estos momentos dónde la geopolítica mundial está en un proceso de cambio rápido y peligroso, los países necesitan líderes. Y Ayuso ha sabido mostrar decisión a la hora de tomar iniciativas, sean mejores o peores, pero las ha tomado y eso hace que la gente vea a una persona que no le tiemble el pulso. Si Ayuso se presentara por el PP a las elecciones generales la victoria popular presumiblemente sería holgada, pero Casado no dejará pasar su momento. Aquí se abre la clave de VOX, el partido que ha entendido al igual que Ayuso que hace falta demostrar a la gente no tener miedo y mostrar una imagen de fuerza. Son y vienen momentos duros y tanto Ayuso como Vox tendrán infinitos detractores, pero nadie puede negar que sean claros en sus mensajes.