El 8 de junio de 2022, Argelia anunciaba la suspensión inmediata del Tratado de Amistad, Buena Vecindad y Cooperación con España, que data de octubre de 2002. Se trató de una respuesta directa a la intervención del Presidente de España, Pedro Sánchez, en la que se reafirmó en su giro respecto al Sáhara Occidental. Además, anunció una nueva política de relaciones estrechas con Marruecos que incluirá, curiosamente, un nuevo Tratado de Cooperación que sustituya al de 1991. Además, el 9 de junio, la Asociación de Bancos y Establecimientos Financieros (Abef) de Argelia anunció la congelación, de las domiciliaciones bancarias en operaciones provenientes y destinadas a España.
El pasado 18 de marzo de 2022, Marruecos publicaba una carta del Presidente de España, Pedro Sánchez, al Rey Mohamed VI donde reconocía la propuesta de autonomía para el Sáhara Occidental como «la base más seria, realista y creíble» para resolver el problema. El gobierno español había acabado con cuatro décadas de “neutralidad” en el conflicto saharaui. España, evadía asumir responsabilidades internacionales para con su excolonia. Argelia llamó a consultas a su embajador en el país, Said Moussi, el 19 de marzo para protestar por ese cambio en la política exterior española.
¿Cómo ha conseguido Marruecos el reconocimiento español sobre el Sáhara ocupado?
El reconocimiento de la postura marroquí sobre el Sáhara Occidental, por parte de España, no es casual, es el fruto de un plan llevado a cabo por Rabat basado en cuatro claves: guerra económica, guerra híbrida, desinformación y alianzas.
Guerra económica
Marruecos aplica acciones de guerra económica contra España. Con el pretexto de la pandemia, Marruecos, decidió cerrar los accesos a Ceuta y Melilla desde su territorio el 30 de junio de 2020. Tras el reconocimiento español sobre la postura marroquí del Sáhara, ha cambiado de parecer y ahora sí, las ha abierto. Hace tres semanas se procedía a la reapertura, pero con hasta un 90% menos de actividad. Cortar las entadas a Ceuta y Melilla ha causado un grave daño económico a estas dos poblaciones. Solo en tasas por las importaciones que entran por estas ciudades, se cree que se han dejado de recaudar más de 60 millones de euros. El IPSI es un impuesto indirecto (similar al IVA) que se aplica a la prestación de servicios y a la elaboración de bienes e importación en las ciudades de Ceuta y Melilla. Además, se deben sumar los gastos directos e indirectos de todas las personas que accedían a las Ciudades Autónomas.
Otra de las acciones de guerra económica que aplica Marruecos contra España se da en el transporte de sus ciudadanos. En Europa viven millones de marroquís que tradicionalmente usaron España como acceso para volver a su país. Todos los años Marruecos organiza la vuelta, visitas o vacaciones de sus compatriotas de Europa que vuelven a casa. En el año 2021, Marruecos negó las licencias a España, para la vuelta de los ciudadanos marroquís a su país por los puertos españoles. Esto supuso un importante golpe a la economía española, ya que hasta ese año los centenares de miles de marroquís que cruzaban España, dejaban grandes ingresos a su paso por el país. El 6 de febrero, el gobierno marroquí, confirmaría que en el año 2022 los ciudadanos marroquís tampoco pasarían por los puertos españoles.
Marruecos dio licencia a los puertos franceses e italianos frente a los españoles. Tras el reconocimiento español sobre la postura marroquí del Sáhara, ha cambiado de parecer y ahora sí, ha dado licencia a empresas españolas.
Guerra hibrida
Una estrategia híbrida o guerra híbrida, es un conjunto de operaciones en el que se utiliza todo tipo de medios y actividades con el objetivo de desestabilizar un territorio y provocar la polarización de su sociedad. Las estrategias híbridas pueden ser llevadas a cabo por ciudadanos, organizaciones o países. Este tipo de estrategias tienen la particularidad de que el agresor se camufle y pueda evitar que le atribuyan el ataque. Si hay una acción de guerra híbrida que marruecos domine y no deja de usar, es el uso de los migrantes. La semana pasa asistimos a un nuevo asalto a la valla de Melilla, con la característica que nunca antes se había dado, tres días seguidos de asalto.
Debemos recordar que en el mes de mayo de 2021 asistimos como miles de personas entraban en Ceuta de manera ilegal. Marruecos es un habitual de la guerra híbrida contra las fronteras españolas empleando civiles. A muchos nos vino a la cabeza la Marcha Verde de 1975 dirigida por Hassan II, padre del actual rey de Marruecos. La marcha movilizó a más de 300.000 personas y 10.000 militares con la idea de invadir el Sáhara Occidental y acceder a sus recursos. Marruecos no dudó en utilizar acciones híbridas con personal civil, y no ha dejado de hacerlo desde aquella.
Desinformación y recursos naturales
Otra de las maneras en que Marruecos emplea acciones de guerra híbrida es a través de la información. Marruecos no solo usa de noticias falsas, sino que también es un usual de la desinformación. Suele crear campañas de «fake news» cuándo surgen protestas internas en el país. Estas campañas culpan a España o Argelia de los males que afectan a la región, con el objetivo de crispar a la población contra sus vecinos y así distraer del descontento interno.
Marruecos utiliza la presión de la guerra híbrida aplicándola hasta en los recursos naturales españoles. El gobierno marroquí ha permitido a una empresa de su país la instalación de una piscifactoría en aguas españolas de las islas Chafarinas. También ha vendido licencias para la instalación de diez piscifactorías en aguas en disputa frente a islas Canarias. Además, el país vecino ha sacado a concurso la exploración de yacimientos de hidrocarburos frente a las costas canarias. Una estrategia híbrida más que Marruecos aplica con éxito contra España. Marruecos ha conseguido con estas acciones crispar a los pescadores españoles afectados, generar divisiones en el parlamento. Partidos como Vox o PSOE discrepan y se enfrentan, por ver como se hace frente a estas provocaciones.
Alianzas
Marruecos ha sabido posicionarse como un aliado principal de EE. UU. En 2020, Donald Trump, como máximo representante de EEUU, reconoce el Sáhara Occidental como parte de Marruecos mediante los Pactos de Abraham. A cambio, Marruecos considera a Israel un estado soberano. EE. UU. necesita a Marruecos por su colaboración frente el terrorismo, frente a la Argelia, aliada de Rusia, y por la situación geográfica cerca de una de las rutas comerciales más importantes del mundo. Se presume que EE. UU. ha presionado a España, por petición de Marruecos, para que reconociera el control marroquí sobre el Sáhara Occidental.
Argelia ha tomado nota de Marruecos
La debilidad evidente que ha demostrado el Gobierno de España frente a Marruecos, le va a salir cara también frente a Argelia. Madrid ya está sufriendo la guerra económica por parte de Argel y se espera un gran aumento de la guerra híbrida mediante migrantes.
Guerra económica por parte de Argelia
El 29 de marzo comenzaban las medidas contra España. Ese día, el gobierno argelino denegada a la española Iberia, incrementar los vuelos entre Madrid y Argel. Ante el aumento del turismo español cara el exterior, tras el Covid, las compañías españolas están buscando recuperar destinos y ampliar rutas. Ante esta situación, se presume que Argelia dará prioridad a las compañías no españolas para ofrecer su país como destino turístico.
El 1 de abril, Toufik Hakkar, presidente de Sonatrach, empresa pública argelina de hidrocarburos, anunciaba el incremento del precio del gas a España, pero no su corte. Además, Argel, dejaba claro que no daría ni una «gota de gas de más» al país europeo, al tiempo que se comprometía con Italia a aumentar las exportaciones de hidrocarburos. El 2 de abril, se producía la última devolución de inmigrantes argelinos desde España a Argelia. Argel, al finalizar la repatriación programada anteriormente, anunció que no expediría más salvoconductos para facilitar devoluciones.
El 13 de abril los ganaderos españoles constataron una súbita suspensión de las licencias de importación de animales vivos, sobre todo vacuno, por Argelia. En 2021, ese país fue el primer cliente de España al adquirir 20.090 toneladas de animales vivos por importe de 47 millones de euros, a los que hay que añadir otros 8,4 millones por las compras de carne de vacuno despiezada. Argel ha sacado a España de su lista de compra de animales vivos y ha confirmado que los comprará a otros países europeos.
El golpe final
«Argelia ha decidido proceder a la suspensión inmediata del Tratado de Amistad, Buena Vecindad y Cooperación que hasta ahora regía las relaciones de desarrollo entre ambos países». Con estas palabras anunciaba la Presidencia de la República de Argelia el 8 de junio que rompía el acuerdo con España. Además, Argelia dejará de importar productos españoles y prohibirá su compra. Un comercio valorado en más de 7.000 millones de dólares con cientos de cuentas de empresas españolas bloqueadas. La naviera Balearia, por ejemplo, ha informado que le han embargado cinco millones de euros. Argel ha respondido con contundencia, y es solo el principio.
La guerra híbrida argelina
Según la información difundida por la Delegación del Gobierno en las Islas Baleares, la primera patera se localizó la noche del 8 de junio a las 02.10 horas con 17 varones en aguas al sur de la isla de Cabrera. En el mismo lugar, a las 03.50 horas, se rescataron otros 20 hombres de la misma nacionalidad. Ambas embarcaciones fueron avistadas previamente por el Sistema Integrado de Vigilancia Exterior (SIVE) e intervenido el Servicio Marítimo Provincial y Salvamento Marítimo. A estos 37 inmigrantes llegados en dos pateras esta madrugada a Cabrera se suman otros 49 que han sido localizados esta mañana. A las 07.30 horas se interceptó a 17 personas que llegaron a tierra al puerto de la Colonia de Sant Jordi, entre las cuales había cuatro mujeres.
Y esto es lo que le espera a España, los próximos meses, Argelia intentará generar división y enfrentamientos utilizando a los migrantes como arma híbrida. Además, se suma a la estrategia de Marruecos en poner, con acuerdo o sin él, a España contra las cuerdas, como su orgullo patrio.
Miéntras no exista un gobierno serio en España, no sé va a poder sacar partido de la importancia estratégica del país. Sobran relaciones métodos de sacar partido a la situación peninsular.